La necesidad de depilación es diferente en cada persona, pero en caso de ser menor a 14 años se recomienda la supervisión de un adulto.

Debe discontinuar el uso del producto y en caso de persistir la irritación, consultar con un especialista.

No se recomienda el uso de productos depilatorios en pieles con granos, acné, venas varicosas, piel irritada, quemada por el sol o piel muy sensible.

No es recomendable el uso de productos depilatorios en personas mayores o enfermos de diabetes, ya que estas pieles son más delicadas y requieren de mayor cuidado.

Al igual que en la cera, las bandas de depilación en frío, el vello es retirado desde la raíz, lo que permite más tiempo entre depilaciones. Basta con seguir las instrucciones de uso indicadas en el envase.

Una vez que la cera esté a una temperatura adecuada, para lo cual se debe leer y seguir las instrucciones del envase. Se procede a aplicar una capa siguiendo el sentido al crecimiento del vello y antes que se termine de enfriar se retira en sentido contrario al crecimiento del vello. La cera depilatoria retira el vello desde la raíz lo que permite más tiempo entre una depilación y otra.

La crema depilatoria contiene ingredientes activos que actúan debilitando el vello, el que debe ser retirado con la ayuda de la espátula (o una esponja de baño) y luego se debe lavar muy bien la superficie de la piel, para retirar cualquier resto de crema de modo que no siga actuando. Se deben leer todas las instrucciones y respetar el tiempo que se indica en el envase.

Si requiere depilarse una misma área, se recomienda esperar al menos 72 horas entre aplicaciones para no provocar irritación.

Se aconseja no tomar sol hasta 24 horas después de depilarse.

Siempre es recomendable hacerlo, ya que la piel puede sufrir cambios y reaccionar en forma diferente a algún componente.